Son las doce de la noche,
el espíritu de la oscuridad
envuelve cálidamente
con un halo de misterio
todo el paraje alejandrino.
En la distancia se escucha
la voz de la doncella casta
escogida para el sacrificio
del último solsticio del año.
El viento silba anunciando
una noche de dolor
una noche de entrega...
la sangre tiñe de rojo
el duro mesón del sacrificio
expiación de males
para salvar este mundo.
2 comentarios:
Me gustaría saber si las vestales,
no fueron copuladas en Carmina;
el sacrificio va y se avecina,
de lo que virginal tiene el cordero;
otro animal rastrero y otro cualquiera, amable compañera de tus ritos.
A qué de tanto ¡simbolismo ufano!,
cuando es que es a mi hermana que arrebatas su virginal tibieza.
Hay quienes van se sacrifican diario, ante el osario de su perfil cretino.
Y se mantienen vivos, con sus escapularios;
sintiendose cordiales y adivinos.
Cuauh
En verdad te digo, Numa dueña de la inspiración de
misteriosa soledad
bañada por la luz de la luna,
cubriendo su templo esférico
bajo cuya cúpula
ardía el fuego permanente
acompañado de las cuatro vestales
de virginidad casta,
es seducida por los autores clérigos
de vida licenciosa y desordenada,
en el tal mencionado monasterio benedictino.
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